La Navidad se ha marchado, pero el frío sigue instaurado. Con el invierno, tu piel se expone a temperaturas extremas o al viento, efectos que se visualizan a través de la deshidratación y resequedad. Por ello, debes tomar precauciones y mantenerte siempre protegido con los mejores medios. En esta estación no es fácil mantener el correcto balance de agua, aunque existen distintas cremas de tratamiento ideales para mantener un rostro sano y radiante a prueba de frío. ¡Consíguelo gracias a este post!

¿Por qué tu piel luce así?

¿Pensabas que con haber superado el verano tu piel ya estaba a salvo? Con el frío, los vasos sanguíneos se estrechan para mantener más el calor y, como resultado, tu piel tiene una apariencia más apagada. Por si fuera poco, debido a las bajas temperaturas, las glándulas sebáceas reducen su actividad y, por lo tanto, nos levantamos cada día con un rostro más seco. Pero tranquilo, tenemos la solución.

¿Qué debe tener la crema hidratante perfecta para el invierno?

Mientras que en verano tiendes a las cremas hidratantes en formato gel o fluidas, en invierno lo que tu piel te pide es un tratamiento más untuoso. Al tener una consistencia mucho más densa, aporta una mayor hidratación que se mantiene a lo largo del día. Si aplicando este proceso no obtienes los resultados que deseas, siempre puedes apostar por brumas hidratantes o por cremas en formato viaje para que no te sea difícil de llevar y puedes aplicártela a lo largo de la jornada.

¿Qué pasa con el cuerpo? Al igual que aplicas cremas hidratantes en tu rostro, tu cuerpo no puede pasar desapercibido. El momento idóneo para aplicarlas es después de la ducha. ¡No dejes ninguna parte de tu cuerpo sin untar! Aprovecha para darte un buen masaje circular y de arriba hacia abajo.

Lo natural se convierte en tu mejor aliado. En el mercado encontramos muchas marcas y variedades de cremas faciales. La mayoría de estas contienen algún tipo de componente químico, alcohol o perfume que puede acabar dañando nuestra piel (qué irónico, justamente lo que estás intentando combatir). ¿Cuál es la mejor solución? Adquirir productos creados a través de elementos naturales y libres de químicos nocivos. Su uso es garantía de éxito para que presumas de cara bonita y saludable.

Recuerda que el cuidado de tu piel es positivo para prevenir, entre otras cosas, el proceso de envejecimiento. Te vas a hacer mayor, pero si puedes ralentizarlo un poco mejor que mejor. Además, ¿quién no quiere protección y suavidad? ¡Mima tu rostro!