Existen plantas prodigiosas, y luego está la cúrcuma. Gracias a su actuación desde diversos frentes en nuestro cuerpo, se ha convertido en toda una revelación entre los remedios naturales. Se le han atribuido virtudes antiinflamatorias, antioxidantes, digestivas y cardioprotectoras, entre otras muchas. En este post prestamos especial atención a esta raíz medicinal cuya presencia debería ser obligatoria en tu cocina. ¡Tu organismo será el gran beneficiado!

¿Por qué es necesario consumir cúrcuma?

Este sabroso condimento natural de Oriente se obtiene del rizoma de la planta Curcuma longa, perteneciente a la misma familia que el jengibre. Su uso culinario abarca numerosos siglos debido a sus efectos beneficiosos para la salud y la preservación de los alimentos. Como curiosidad, su color amarillo brillante estaba vinculado con el sol, motivo por el que era empleada a modo simbólico y ceremonial.

Remedio para ayudarnos a protegernos. Junto a la curcumina y curcuminoides están presentes el betacaroteno, turmenona y limoneno, componentes que actúan, y nos pueden ayudar, como protectores contra diferentes tipos de cáncer (de mama, piel, colon y de duodeno). Todos ellos favorecen la eliminación de sustancias potencialmente cancerosas, al mismo tiempo que producen otras para combatirlas. Por ello, la cúrcuma se convierte en una gran aliada a la hora de ayudarnos a controlar diferentes factores que intervienen en el desarrollo de este tipo de enfermedades.

Con su uso inhibirás la producción de prostaglandinas antiinflamatorias. Por ejemplo, los componentes de la cúrcuma provocan que los pacientes de artritis reumatoide puedan beneficiarse de estas propiedades, ya que reduce las dolencias que los calmantes no pueden contrarrestar. ¡Y sin efectos secundarios!

Tu hígado lo agradecerá. Su consumo favorece el buen funcionamiento de este órgano, pues le ayudará a desintoxicarse disminuyendo así los niveles de colesterol y haciendo más fluida la bilis. Estos efectos mejoran considerablemente las digestiones pesadas. ¡Di adiós a las grasas con mayor facilidad! Antidepresivo natural. La cúrcuma ha sido utilizada a lo largo de los años para tratar trastornos de la tristeza, pues estimula el sistema nervioso incrementando la sustancia de la felicidad, llamada serotonina.

Actúa como tónico estomacal y contra su malestar. Su utilización mejorará significativamente la acidez de este órgano al mismo tiempo que estimularás las secreciones de los jugos gástricos. ¡Lo tiene todo! Ayuda al órgano vital, el corazón. No contenta con todos los beneficios anteriores, la cúrcuma también presta atención al motor de nuestro cuerpo. Sus componentes son los encargados de bajar los niveles del colesterol malo y los triglicéridos. Esta es la razón por la que te aconsejamos condimentar con cúrcuma tus platos.

Es imposible resistirse a sus múltiples propiedades. Seguro que ya estás pensando en incluirla en tu cocina, eso sí, consulta con tu nutricionista su uso para implementarla correctamente en tu dieta. ¡Abastécete de todas sus ventajas!