Los carbohidratos suelen ser uno de los componentes que siempre intentamos evitar cuando empezamos una dieta, o queremos cuidarnos más en la alimentación. Siempre hemos oído que no son muy beneficiosos, pero no es del todo cierto, todo en abundancia es malo, pero como todo, también cuentan con muchas propiedades.

La inulina es un carbohidrato que ayuda a mejorar nuestra salud. Puede que nunca hayas escuchado hablar de ella, o que por el contrario la hayas observado como elemento de algún producto alimenticio.

¿Quieres conocer en qué puede ayudarte?

Beneficios de la inulina para nuestro cuerpo

Pero ¿qué es la inulina? Es uno de los elementos que más estudios ha generado en farmacia, medicina y en el mundo alimenticio. Esto ha provocado que podamos conocer cuáles son todas sus propiedades y cómo nos puede ayudar a mejorar nuestra salud.

Se encuentra presente en las raíces, tubérculos y rizomas de algunas plantas. Tiene una apariencia que se asemeja a la del almidón. Al unirlo con el agua esto consigue formar una especie de gel.

La inulina forma parte del grupo de los alimentos prebióticos. Este tipo beneficia la creación de bacterias que habitan en nuestro intestino, creando la microbiótica o flora intestinal. Estas están destinadas a eliminar las bacterias extrañas y así evitar que se instalen en nuestro organismo y nos provoquen algún tipo de enfermedad. Incluirla en nuestra dieta puede ayudarnos a mejorar nuestra calidad de vida. Logra mejorar la digestión de los alimentos y contribuye a que nuestro cuerpo asimile mejor los minerales como el calcio y el magnesio. Reduce los gases, previene el estreñimiento y la inflamación intestinal.

Por esto mismo, si tu objetivo es perder peso, la inulina puede ayudarte a mejorar los índices hormonales de la saciedad y así reducirás la sensación de hambre. De esta manera evitarás comer a deshoras y con pequeñas porciones te sentirás saciado.

¿Dónde puedes encontrar la inulina?

Puedes encontrarla en numerosos alimentos. Entre ellos encontramos los espárragos, el ajo, la cebolla y el puerro. En unas cantidades más pequeñas los podemos disfrutar en cereales como el trigo, la cebolla y el centeno, o en frutas como el plátano.

Otra opción muy sencilla para que puedas incluir la inulina en tu dieta diaria es mediante los suplementos dietéticos. Suelen ofrecerlos en farmacias o herbolarios. Las capsulas suele ser el formato más habitual, en este caso puedes consumirlas según te indiquen en el prospecto, teniendo siempre cuidado de no pasarte en su consumo.

Tras conocer todos estos beneficios intenta incluir la inulina en tu alimentación diaria. Notarás una mejora en tu salud y bienestar.